Avanzando hacia la equidad en salud para la comunidad LGBTQ
Los/las integrantes de la comunidad LGBTQ enfrentan desafíos de salud particulares. Para reducir las inequidades, los proveedores de atención de salud deben cultivar actitudes abiertas y de aceptación hacia sus pacientes, así como la capacidad de recopilar y analizar datos sobre la población en su conjunto, según defensores y aliados.
Sin un impulso para analizar datos sobre orientación sexual, identidad de género y otras formas en que los/las pacientes se identifican a sí mismos(as), es difícil discernir cómo la pandemia de COVID-19, por ejemplo, afecta a la comunidad LGBTQ, lo que hace que algunos(as) integrantes de esa comunidad se sientan invisibles.
“La pandemia y la posterior iniciativa de vacunación ilustra lo importante que es proporcionar un entorno abierto y que acepte a los/las pacientes de cualquier comunidad, incluida la comunidad LGBTQ, para que informen sus preferencias, pronombres, género, etc.”, dijo la Dra. Sylvia Meltzer, médica de familia de Milwaukee. “Esto es importante no solo desde el punto de vista del seguimiento de enfermedades y la capacidad de diseñar intervenciones, sino también para que podamos brindar la atención de salud más adecuada posible a cada persona”.
El análisis de los datos de orientación sexual e identidad de género aumentaría la visibilidad de las disparidades en la vacunación y permitiría a los legisladores y proveedores de atención de salud asignar recursos de manera más ágil y equitativa, y crear campañas de mensajes para los integrantes de la comunidad LGBTQ, explican Meltzer y otros.
Meltzer quiere normalizar la recopilación de estos datos, al igual que la edad, la raza, el origen étnico y otra información demográfica. Al buscar estos datos, Meltzer insta a otros proveedores a hacer preguntas de una manera que indique apertura. Esto generará confianza, respeto y una sensación de seguridad.
“El Mes del Orgullo es un momento excelente para que todos(as) nosotros(as), como proveedores de atención de salud, pensemos en el entorno que creamos para nuestros(as) pacientes”, indicó Meltzer. “¿Estamos haciendo preguntas de una manera que indique apertura a respuestas no normativas, seguridad y compasión? Por ejemplo, cuando hablamos de historia social y sexual, debemos indicar que no estamos haciendo suposiciones y que estamos abiertos(as) a que los/las pacientes revelen cosas que son importantes para ellos/ellas como personas y que son importantes para nosotros(as) para brindarles la mejor atención posible”.
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Amy Werdin, health enews contributor, is a provider public affairs coordinator with Advocate Health Care and Aurora Health Care. She has been with the organization for 19 years, starting out in marketing for Advanced Healthcare, then Aurora Health Care and now in her current role. She enjoys reading, movies and watching her two daughters dance and her son swim.