El ataque cerebral es una complicación grave de este trastorno cerebral poco frecuente
Javier Bolanos se despertó de repente una noche sintiéndose enfermo y muy confundido.
No podía alcanzar su teléfono. No podía levantarse de la cama. Cuando su mamá y su novia lo encontraron y llamaron a una ambulancia, no podía responder sus preguntas.
En Advocate Condell Medical Center en Libertyville, IL, los médicos determinaron que Bolanos, de 21 años, estaba sufriendo un ataque cerebral hemorrágico. El sangrado cerebral fue causado por una malformación arteriovenosa (MAV), un enredo anormal de los vasos sanguíneos que se debilitaron hasta el punto de romperse.
La mayoría de las MAV cerebrales son congénitas y pueden presentar problemas en cualquier momento de la vida de una persona, como dolores de cabeza, convulsiones, debilidad muscular, una disminución en el desempeño cognitivo u otros síntomas neurológicos de gravedad variable, dijo el Dr. Demetrius Lopes, codirector del Programa Integral de Accidentes Cerebrovasculares de Advocate Aurora Health.
En el caso de Bolanos, los síntomas no existían hasta la ruptura de la MAV, la complicación más grave y potencialmente dañina. “Me tomó por sorpresa”, dijo.
Bolanos fue trasladado a Advocate Lutheran General Hospital en Park Ridge, IL, donde su equipo de atención evaluó rápidamente las opciones de tratamiento. Debido a que su MAV estaba ubicada en lo profundo del cerebro, hubiera sido muy riesgoso llegar a ella en una cirugía abierta, dijo el Dr. Lopes. Debido a la urgencia de la hemorragia, también se descartó la posibilidad de radiocirugía, un tipo de radioterapia que se encoge y cierra los vasos sanguíneos anormales con el tiempo.
En cambio, Bolanos se sometió a una embolización endovascular, un procedimiento en el que los cirujanos insertaron un catéter en la arteria de la muñeca y utilizaron los vasos sanguíneos como una vía natural para acceder a la malformación en el cerebro, dijo el Dr. Lopes. La parte más peligrosa de su MAV se selló, eliminando así la posibilidad de otra ruptura.
“Nuestra red de centros especializados en ataques cerebrales puede brindar esta amplitud de atención a pacientes de cualquier edad”, explicó el Dr. Lopes. “Tenemos un increíble equipo de expertos en todo nuestro sistema”.
El camino hacia la recuperación ha sido difícil para Bolanos, que perdió el movimiento en el lado derecho del cuerpo después del ataque cerebral y pasó un mes en la unidad de cuidados intensivos de Advocate Lutheran General. Desde que recibió el alta en diciembre de 2021, ha pasado innumerables horas en rehabilitación para recuperar la movilidad, y su arduo trabajo ha dado sus frutos.
“Ha sido un proceso largo y difícil, pero sin dudas estoy viendo mejoras”, indicó Bolanos, que ahora puede caminar y mover el brazo nuevamente. “Solo vivo todo día a día y espero lo mejor”.
Los médicos han quedado impresionados con el progreso de Bolanos, dijo el Dr. Lopes, no solo con respecto al aumento de su movilidad, sino también a su personalidad vibrante y su perspectiva positiva sobre el futuro. Bolanos, un superfanático de los Chicago Bears, recibió recientemente una experiencia de ensueño al recorrer las instalaciones de práctica de Halas Hall y conocer a su jugador favorito, Roquan Smith.
“La mejora de Javier en un corto período ha sido enorme”, expresó el Dr. Lopes. “Para mí, la increíble recuperación de este joven habla mucho de su resiliencia, la atención que recibió y el apoyo de sus seres queridos. Es una combinación ganadora, no hay duda de eso”.
Los síntomas de la MAV pueden ocurrir al azar, y a menudo, la afección no se diagnostica o se descubre incidentalmente, explicó el Dr. Lopes. El National Institute of Neurological Disorders and Stroke estima que las MAV cerebrales ocurren en menos del 1 % de la población general y representan aproximadamente el 2 % de todos los ataques cerebrales hemorrágicos cada año.
Cuando se trata de la atención de un ataque cerebral, el tiempo es lo más importante para prevenir el daño cerebral y otras complicaciones. Si sospecha que alguien está sufriendo un ataque cerebral, recuerde las señales de advertencia de A.H.O.R.A.:
Andar: ¿la persona experimenta dificultad para caminar?
Hablar: ¿la persona tiene dificultad para hablar?
Ojos: ¿la persona tiene dificultad para ver?
Rostro:pídale a la persona que sonría. ¿Tiene la mitad del rostro caído?
Ambos brazos o piernas: pídale que levante ambos brazos o piernas. ¿Un brazo o una pierna tiende a caerse?
Terrible dolor de cabeza, hora de llamar al 911: ¿La persona tiene un dolor muy fuerte que se siente como “el peor dolor de cabeza que haya tenido”? Si observa alguno de estos síntomas, llame al 911 de inmediato.
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Lauren Rohr is a public affairs coordinator with Advocate Health Care and Aurora Health Care. She studied journalism at the University of Illinois at Urbana-Champaign and spent the last several years working as a news reporter covering public health, local government, politics, education and all facets of life in the Chicago suburbs. In her free time, she enjoys reading, baking, staying active and cheering on her favorite sports teams, especially the Chicago Blackhawks and the Fighting Illini.